El sindicato automotriz UAW y Ford alcanzan un acuerdo tentativo para poner fin a la huelga

Se espera que el sindicato United Auto Workers (UAW, en inglés) anuncie el miércoles por la noche un acuerdo tentativo de contrato con Ford, que significaría un gran paso en el camino hacia el fin de las huelgas de casi seis semanas que mantienen los trabajadores de automóviles de Detroit.

Dos personas con conocimiento de la negociación dijeron que la empresa y el sindicato están trabajando en los detalles finales del contrato y podrían anunciarlo el miércoles por la noche en un video con el presidente de la UAW, Shawn Fain. Las fuentes pidieron no ser identificadas porque no están autorizadas a hablar públicamente sobre la negociación.

Los términos del acuerdo no estuvieron disponibles de inmediato, pero ambas partes han estado discutiendo un contrato de cuatro años. El acuerdo tendría que ser aprobado por 57,000 miembros del sindicato en Ford.

Las fuentes dijeron que el sindicato hizo una contraoferta a Ford en la que proponía un aumento general de 25% de los salarios durante la duración del nuevo contrato, y dijo que las negociaciones el martes se extendieron hasta el miércoles. Anteriormente Ford, Stellantis y General Motors había ofrecido un aumento de 23% de los salarios.

El acuerdo con Ford incluiría incrementos por los costos de vida que podrían llevar los aumentos salariales por encima de 30%, indicaron las fuentes. Además, los trabajadores recibirían bonificaciones anuales por ingresos.

Típicamente, durante las pasadas huelgas en la industria automotriz, los acuerdos de UAW con algunos de los fabricantes de autos ha llevado a las otra compañías a equiparar sus propios arreglos con el sindicato.

Una de las fuentes dijo que también se había logrado progreso en las conversaciones con GM. No quedó claro si alguno de los fabricantes de autos había aceptado la contraoferta de UAW de un aumento de 25% durante los próximos cuatro años.

El progreso en las negociaciones tuvo lugar después de que el sindicato comenzó un paro en tres fábricas que producen camionetas y SUV, que dejan grandes ganancias, las que se suman a una lista de otras instalaciones en huelga, como parte de una estrategia para aumentar la presión sobre las compañías.

El martes, unos 5,000 trabajadores de la planta de ensamblaje de GM en Arlington, Texas, se declararon en huelga y paralizaron la producción de SUV que tienen como base camiones y que generan grandes beneficios para la empresa. Un día antes, el presidente de la UAW, Shawn Fain, había sumado 6,800 empleados en la planta de camionetas Ram de Stellantis en Sterling Heights, Michigan.

Dos semanas atrás, el sindicato se fue a la huelga en la fábrica más grande y rentable de Ford, la Kentucky Truck Plant, en Louisville, donde 8,700 trabajadores fabrican la serie de camionetas F y dos modelos de SUV grandes.

En total, unos 46,000 trabajadores se han sumado al paro en fábricas propiedad de las tres compañías en una serie de huelgas puntuales que comenzaron el 15 de septiembre. Alrededor de 32% de los 146,000 miembros del sindicato de la industria automotriz están en huelga y están recibiendo 500 dólares por semana como parte de los pagos por la huelga. Los fabricantes de automóviles han estado despidiendo trabajadores en otras plantas a medida que las partes de autos comienzan a escasear en sus sistemas de ensamblaje.

Todd Dunn, presidente de la rama local de UAW en Kentucky Truck Plant, de Ford, dijo que personas en el círculo del liderazgo del sindicato le habían dicho que la compañía se estaba acercando a un acuerdo.

«He oído que la aguja se está moviendo [en esa dirección] de la manera más agresiva posible», afirmó Dunn en una entrevista el miércoles. «Es algo muy positivo».

La posibilidad de un acuerdo, dijo, ha levantado los ánimos de los trabajadores, quienes están dispuestos a seguir en huelga hasta conseguir un acuerdo, a pesar de las dificultades que ello representa.

Dunn afirmó que la huelga en su planta ha empujado a Ford en las conversaciones y podría llevar al mejor contrato que haya visto en sus 29 años en la compañía.

Las compañías y el sindicato no comentaron sobre las conversaciones el miércoles. La contraoferta del sindicato de un incremento de 25% en los salarios durante cuatro años fue reportada anteriormente por Bloomberg News y la publicación dedicada a la industria automotriz, Automotive News.

Uno de los principales asuntos es si se extiende el contrato anual de UAW a las 11 fábricas de baterías eléctricas en Estados Unidos. Ello aseguraría que esos trabajadores estarían representados por el sindicato.

Todas estas plantas, menos una, son empresas conjuntas con un fabricante de baterías coreano. GM ha accedido a ello, pero las otras compañías no lo han hecho, y han argumentado que los socios en las empresas conjuntas tienen también que aceptarlo.

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